martes, 17 de mayo de 2011

LA VIOLA, en mayúsculas





No hay nadie que se pueda resistir a esta melodía, si te ha gustado sigue leyendo:

Como han cambiado los tiempos para la viola antes era imprescindible un buen repertorio de violas para mostrar una buena educación y estatus social en la burguesía y ahora es una gran desconocida, o si tiene suerte se la conoce a la sombra del violín.

Empezó haciéndose un hueco entre los instrumentos de cuerda el primer concierto para viola fue de mano de Telemann en 1731.


A partir de ese momento gracias a otros compositores violistas se dio realmente a conocer.

Incluso llegó a ser la protagonista en la aristocracia gracias a Wagner, Weber o Berlioz.

formó parte importante de la sinfonía concertante de Mozart y el poema sinfónico de Richard Strauss
Desgraciadamente empezó a pasar a la sombra del violín en el renacimiento, volviendo al auge en el barroco compitiendo en igualdad con él.

El problema es la fama que se llevó en los orígenes de la orquesta moderna en la que el violín hizo que se infravalorara el papel de la viola que goza de un sonido más calido en ciertas ocasiones dramático y penetrante.

Hoy en día lucha por ganarse el lugar que le corresponde a través de su fuerte carácter expresivo y delicado, siendo fundamental en la orquesta.


Por último un regalo para los sentidos de 45 minutos






El tema trata...(de forma muy muy resumida):

“...Berlioz aceptó el encargo de Paganini. Había estado planeando componer una segunda sinfonía y el estímulo de un encargo lo hizo pensar en "una pieza de solo para viola, pero un solo combinado con la orquesta de tal manera que ello no afectara la expresión de la masa orquestal... Mi idea era escribir una serie de escenas para la orquesta en las que el solo de viola se involucrara como un carácter más o menos activo, reteniendo siempre su propia individualidad. Al ubicar la viola entre los recuerdos poéticos de mis vagabundeos por los Abruzzos, deseé convertirla en una suerte de soñador melancólico, a la manera del Childe Harold de Byron. De ahí el título Haroldo en Italia." 


“…En 1838, Paganini, que por entonces estaba viejo y débil, oyó Haroldo por primera vez. Le dijo a Berlioz: "Jamás me había sentido tan poderosamente impresionado en un concierto. Si no me contengo, me hubiera puesto de rodillas para agradecérselo." Poco tiempo después de esto, Berlioz recibió una fuerte suma de dinero que él pensó sería un presente de Paganini. En realidad, el violinista era un tacaño y el dinero provenía de un amigo de Berlioz, Armand Bertin…”

(Texto sacado de una mágnifica web que os recomiendo que visiteis si os ha gustado y quereis leer más http://hagaselamusica.com/clasica-y-opera/obras-maestras/haroldo-en-italia-de-hector-berlioz/)

1 comentario: